La creación de una pila integrada de tecnología, o «tech stack», juega un papel vital en el crecimiento de un negocio.
A menudo, los líderes de los negocios invierten en aplicaciones, conectándolas con sistemas existentes, y esperando que todo vaya bien. Pronto descubren que no es una forma efectiva de lograr sus metas de sus negocios.
Una estrategia mejor comienza fijando objetivos claros, colaborando en todos los ámbitos de la empresa, y seleccionando las herramientas adecuadas para las necesidades específicas de la organización.
Para un crecimiento a largo plazo de un negocio, los líderes del negocio también deben priorizar la prueba continua de la integración de su pila de tecnología para asegurarse la usabilidad y funcionalidad a largo plazo.
¿Qué es una tech stack?
Es la colección de productos digitales y de tecnologías que utiliza una organización para realizar sus tareas. Abarca el software, las aplicaciones web, las bases de datos, y otros sistemas que con partes fundamentales de cómo funciona una organización. Esto incluye herramientas utilizadas en diferentes departamentos organizativos, desde márquetin y ventas hasta recursos humanos y finanzas.
Una tech stack adecuada incluye aplicaciones que se integran fácilmente con cada una de las demás para simplificar y optimizar los procedimientos del negocio y permitir el crecimiento. Ofrecer valor y crecimiento son valores prioritarios en la lista de objetivos para cualquier organización empresarial. Alcanzarlo es más sencillo cultivando una tech stack con las herramientas adecuadas.
Construyendo la Tech Stack Adecuada
Crear una tech stack involucre mucho más que seleccionar las últimas tecnologías, integrarlas, y esperar que su organización, departamento, o equipo mejoren su forma de funcionar. Antes de invertir en una nueva aplicación o software, los líderes del negocio deberían considerar lo siguiente:
1. Evaluar resultados antes que herramientas
Implementar un conjunto de herramientas antes de conocer qué necesita ser mejorado te asegura problemas más adelante.
Primero, las organizaciones necesitan preguntarse “¿Qué estamos intentando lograr? ¿Cuál es el resultado deseado? ¿Qué está evitando que logremos estos resultados?”
Por ejemplo, si la experiencia de usuario está por debajo de las expectativas, implementar un sistema CRM completamente nuevo no es una solución completa. Primero, los líderes deben averiguar por qué la experiencia de usuario no va bien.
Demoras en la entrega de pedidos, comunicación ineficiente con el cliente, o un sistema de notificaciones lento pueden ocasionar una experiencia desagradable de usuario. Los detalles del pedido del cliente podrían haber sido introducidos incorrectamente o podrían no haber llegado en absoluto al centro logístico. Quizá el equipo de suministro de software esté invirtiendo mucho tiempo en verificar defectos de código de forma manual, no quedándoles tiempo para trabajar en las nuevas prestaciones.
Entender la causa principal de los problemas de prestaciones es crítico para solucionarlos. Las herramientas simplemente deberían facilitar esta tarea. El propósito inmediato y principal de construir una tech stack es coordinar procesos con objetivos de negocios para conseguir el mayor valor posible.
2. La colaboración es clave
Los silos organizativos deben se descompuestos para mejorar la toma de decisiones a la hora de crear una tech stack plenamente funcional. Utilizar una aproximación indagadora entre departamentos es necesario, independientemente del tipo de tech stack que se esté construyendo.
Por ejemplo, si una plataforma CRM se está implementando de forma aislada para solucionar los problemas de experiencia de usuario, pero un centro de distribución no está al tanto, un flujo de trabajo de completar un pedido podría venirse abajo por completo. Tener una conversación inicial con los elementos relevantes puede revelar cuellos de botella y determinar si se requiere de tecnologías adicionales para cubrir carencias.
Con representantes de los equipos y departamentos relevantes, identificar problemas y marcar objetivos claros es más sencillo. Una vez establecidos, crear los flujos de trabajo adecuados que optimicen y automaticen el proceso, es sencillo.
3. Consultar a los expertos
Cualquier aplicación o sistema puede funcionar por sí mismo desde su inicio, pero pocas organizaciones requieren de ese nivel de simplicidad. Para afrontar las necesidades específicas de un negocio y asegurarse de que cualquier tech stack aporta valor, son necesarios diferentes grados de personalización.
Un área principal es implementar lógica de negocios para crear flujos de trabajo personalizados. Los flujos de trabajo personalizados en cualquier tech stack seguirán normalmente un proceso paso a paso e incluirán reglas complicadas. Características como campos obligatorios, reglas del negocio, y condicionales, serán implementados para asegurar que cada aplicación y flujo de trabajo funciona adecuadamente.
Aunque muchas aplicaciones de interfaz de usuario (UI) son fluidas, el número de acciones potenciales, caminos, y rutas que puede tomar un usuario es amplio. Nada garantiza que los usuarios irán del punto A al B, al C, y al D en este orden. Es critico consultar con los equipos de software para asegurarse de que las reglas del negocio están implementadas correctamente y de que las diferentes opciones que puedan tomar los usuarios son probadas adecuadamente.
Otra área técnica a considerar es cómo funciona una plataforma o software cuando se integra con diferentes tecnologías. El equipo de TI debería estar presente en estas conversaciones. Los expertos en software entenderán mejor las ventajas e inconvenientes de utilizar un lenguaje de programación u otro. Entender lo que implica cuando se integran aplicaciones con bases de código diferentes es esencial. Las organizaciones no quieren invertir en una tech stack para al finar comprobar que nadie puede automatizar el flujo de trabajo.
Consultar con el equipo de Desarrollo software es necesario porque habrá que realizar de forma continua pruebas de extremo a extremo. Además, diferentes bases de código, actualizaciones, nuevas funcionalidades, y mantenimiento ocurrirán con frecuencia, lo que requiere de pruebas rigurosas para mantener la funcionalidad en todas las plataformas.
Poner a Prueba tu Tech Stack Es Imperativo
Fijar objetivos claros, la colaboración en toda la empresa, encontrar las herramientas adecuadas, e implementar esas herramientas es sólo el principio. Para que una tech stack funcione adecuadamente es imperativo realizar pruebas continuas y esto implica aprovechar la automatización.
Probar y supervisar la experiencia de usuario
Una tech stack no utilizada no tiene sentido. Para asegurar su usabilidad, lo mejor es ponerla a prueba desde el punto de vista del usuario. Sin embargo, no todas las herramientas de automatización de pruebas tienen esta capacidad. La mayoría de las herramientas de prueba simplemente evalúan el código y verifican la experiencia de usuario desde el backend, pero para la mayoría de las aplicaciones modernas, esto no es suficiente.
Las aplicaciones actuales tienen interfaces de usuario (UI) complejas que utilizan elementos como los iFrames, menús desplegables, y ventanas emergentes, para ofrecer una experiencia de usuario mejor. Estos elementos pueden ser geniales para un usuario, pero es complicado verificarlos con una herramienta que sólo revisa el código.
Hacer pruebas desde la perspectiva del usuario significa observar intencionadamente lo que ve el usuario. Por ejemplo, una Ventana emergente puede aparecer tapando un botón que hay que presionar para poder completar una acción crítica para el flujo de trabajo. Herramientas específicas basadas en objetos no identificarían esto como un problema porque sólo verifican el código en vez de validar la UI.
Probar los journeys de usuario con IA
Las personalizaciones son esenciales para cualquier tech stack y, en concreto, los flujos de trabajo. La lógica del negocio determina estos flujos de trabajo personalizados, incrementando el número de journeys de usuario que deben ser verificados.
Los usuarios no se mueven necesariamente siguiendo una secuencia lineal. Un paso del proceso podría ser accesible desde diferentes caminos. Los usuarios podrían olvidar introducir los datos necesarios, lo que implicaría que tendrían que volver atrás o refrescar la página.
Esperar que un comprobador manual pueda predecir todos los journey de usuario posibles y todas las acciones posibles no es viable. En su lugar hay que utilizar una solución automatizada de pruebas que realice una exploración inteligente mediante el uso de inteligencia artificial (IA) para incrementar la cobertura generando automáticamente casos de uso para todos los journey de usuario posibles.
Probar cualquier tecnología
Debido a los complejos sistemas, dispositivos y bases de códigos involucrados en todas las tech stack, las organizaciones necesitan una solución que pueda automatizar pruebas extremo a extremo reales mediante una única prueba, sin importar las tecnologías involucradas.
La alternativa es utilizar varias herramientas de pruebas, manuales o automatizadas, y crear casos de uso para cada tecnología, sistema y aplicación que forme parte de la tech stack.
Considerando que la mayoría de las tech stack están basadas en la nube, los usuarios estarían accediendo a plataformas en diferentes navegadores, en múltiples dispositivos, construidos con diferentes lenguajes de programación. En algunos casos, simplemente acceder a una aplicación requiere de una autentificación en dos pasos, lo que implica utilizar journeys de usuario en un amplio rango de ordenadores y dispositivos móviles.
Hacer pruebas manuales de estos escenarios o utilizar varias herramientas lleva tiempo, un tiempo que sus competidores utilizarán para lanzar nuevas funcionalidades y productos al mercado más rápido.
