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Puntas de prueba Fluke TL175 TwistGuard™

Como profesional, sabe que un proyecto completado con éxito necesita algo más que una gran visión estratégica. También hay que tener en cuenta los pequeños detalles. La información sobre cómo realizar el trabajo y su habilidad para ello tienen verdadero peso. Los profesionales de Fluke piensan del mismo modo. Al trabajar con profesionales que usan estos productos cada día, tomaron una de estas “pequeñas cosas”, los cables de prueba eléctricos, y les agregaron unas características que los hacen más duraderos, más versátiles y, sobre todo, más seguros. El resultado fueron los cables de prueba TL175 TwistGuard™ de Fluke, los primeros en el mundo con puntas de longitud ajustable para su uso en entornos CAT II, CAT III y CAT IV. En condiciones de mayor riesgo de peligro (CAT IV y CAT III), un giro retrae las puntas para reducir la posibilidad de un contacto accidental con superficies energizadas. Cuando se trabaja en entornos CAT II, se pueden extender las puntas a fin de tener mejor acceso a contactos difíciles de alcanzar, tales como dentro de las tomas de corriente de las paredes. Tanto si las puntas están retraídas como extendidas, los cables siempre muestran la clasificación correcta de la categoría.
Un sistema para pruebas seguras
El equipo de protección personal (EPP), los instrumentos de prueba y los accesorios que se usan en las pruebas eléctricas incluyen un sistema de seguridad. De hecho, de acuerdo con la Asociación Nacional de Protección contra Incendios (NFPA, por sus siglas en inglés), el estándar para la seguridad eléctrica en el lugar de trabajo 70E define el instrumento de medida como una parte integral del EPP. En resumen, desde la ropa, los guantes y las gafas, hasta los multímetros digitales y los cables de prueba, cada pieza de equipo que se use en comprobaciones debe haberse diseñado y aprobado para trabajar con seguridad en su entorno de trabajo. Todo profesional debe asegurarse de que sus accesorios, incluidos los cables de prueba, tengan la clasificación apropiada para un uso seguro en su entorno de trabajo. Los cables deberían tener una clasificación de categoría de seguridad (CAT) por lo menos tan alta como la del multímetro que está utilizando. Si usa cables de prueba que NO venían junto con su multímetro, podría estar comprometiendo su seguridad personal. Incluso si los cables vinieron con el producto: ¿siguen estando a la altura de los estándares actuales?
Doblemente aislados, extraseguros
Los cables de prueba que ha acumulado desde hace años podrían no estar diseñados con el aislamiento necesario para los entornos eléctricos actuales. Además, los cables de prueba están sometidos a un desgaste y abuso tales que podrían dañar el aislamiento fácilmente. Por ejemplo, los cables que han sido pellizcados por la puerta de un panel o que se han retorcido debido a dobleces significativas presentan una reducción de su capacidad de aislamiento en esos puntos de estrés. En los cables Fluke Twist- Guard™, por su parte, los hilos con doble aislamiento WearGuard™ proporcionan otra ventaja de seguridad adicional. Si la capa exterior del aislamiento presenta huecos ocasionados por muescas o desgaste, el color interior se transparenta de manera clara, lo cual indica que es hora de hacerse con un juego de cables nuevo. Estos cables están aislados con silicona, por lo que resisten las altas temperaturas y, a la vez, se mantienen flexibles a temperaturas muy bajas. Están clasificados para soportar temperaturas de -20°C a 55°C (-4°F a 131°F). Sus clavijas de entrada universales son compatibles con todos los instrumentos que aceptan conectores envueltos estándar de tipo banana de 4 mm. Los accesorios como las pinzas cocodrilo AC72 de Fluke simplemente se deslizan sobre las puntas extendidas. Los cables de prueba TL175 también aceptan accesorios roscados, como los adaptadores de linterna de 4 mm. La durabilidad es otra “pequeña cosa” que planearon los ingenieros de diseño. Los cables TwistGuard™ contienen un aliviador de tensión para tareas extrapesadas, tanto en el extremo de la sonda como en el de la clavija, y se han doblado más de 30.000 veces sin que se haya producido fallo alguno.